En la actualidad existe un reconocimiento del papel central que la
educación desempeña en los procesos de desarrollo. La educación deja de ser
entendida como una mera “consecuencia” del crecimiento económico para ser
concebido como una de las fuentes del proceso de desarrollo que impacta tanto
en sus aspectos sociales y políticos como en aquellos estrictamente económicos.
En la concepción de la educación como fuente del desarrollo ésta se
enfrenta a nuevos desafíos: entre otros, expandir y renovar permanentemente el
conocimiento, dar acceso universal a la información y promover la capacidad de
comunicación entre individuos y grupos sociales. Las políticas educacionales
que implican la incorporación de las TIC en los establecimientos educacionales
– y su utilización efectiva, tanto en los procesos de enseñanza/aprendizaje
como en la organización de la tarea docente – son una forma de dar respuesta a
estos desafíos. Por lo tanto, no son una simple moda o una mera sofisticación
sino que responden a las necesidades de desarrollo de los países y de inserción
en el mundo globalizado.
DIFICULTADES
“Las nuevas tecnologías no fueron concebidas para
la educación; no aparecen naturalmente en los sistemas de enseñanza; no son demandadas por la comunidad docente; no
se adaptan fácilmente al uso pedagógico”. Esto plantea uno de los problemas
claves de la relación entre las políticas de educación y las TIC:
- La dificultad de “implantar” a la educación elementos que le son extraños, que no surgen ni se desarrollan dentro de los sistemas educativos y, por tanto, que no se instalan en ellos de manera “natural”.
- La exterioridad de la demanda hace que la incorporación de las TIC a la educación resulte ser un proceso altamente dificultoso. En este proceso de “afuera” hacia “adentro” del sistema educacional, la dimensión temporal es clave: los cambios generados por la incorporación de las TIC a la educación no son inmediatos ni fáciles de identificar. Se trata de un proceso complejo que sólo da frutos del mediano a largo plazo.
- En algunos casos, la noción de “TICs en la educación” produce confusión, pues hay quienes usan el término para referirse al modo en que los estudiantes aprenden a usar las TIC (porque esa es una habilidad que demanda el mercado laboral en la actualidad) mientras otros lo usan para referirse a la educación “tradicional” a través de las TIC, que sería el campo del “e-learning” y la educación a distancia a través de tecnologías de la comunicación.
Otras dificultades que se pueden presentar son:
No hay comentarios:
Publicar un comentario